sábado, noviembre 04, 2006
- LA SAGRADA FAMILIA -
La Sagrada Familia: una "joya" que desde 1883 está en construcción
La ciudad de Barcelona recibió como ninguna otra en el mundo el regalo del talento del arquitecto Antoni Gaudí (1952-1926) quien logró que sus aspiraciones artísticas se fundieran con su profesión dejando notables muestras de inmuebles que trascendieron su propia utilidad y tiempo, transformándose en verdaderas obras de arte.
El Templo La sagrada Familia
Su cumbre, es el templo de la Sagrada Familia, proyecto faraónico comenzado en 1883 que aún hoy aún continúa en construcción. Gaudí tenía 31 años cuando tomó la posta para continuar las recién iniciadas obras tras el abandonó de otro arquitecto. Decidió modificar por entero la iniciativa para imprimirle su particular sello. Durante los restantes 43 años de su vida trabajó apasionadamente en la obra, los últimos 15 años de forma exclusiva.
El proyecto contemplaba la realización de un templo con cuatro fachadas distintas - todas simbólicas- y dieciocho torres. Hoy sólo se ha completado un 55 % por ciento y se estima que se tardarán entre 20 y 25 años para que concluya la tarea.
Durante la Guerra Civil Española se pararon las obras y hasta se destruyó el taller que utilizaba el arquitecto. Allí se perdieron muchos esbozos, maquetas y modelos. Lo que se salvo fue empleado desde 1940 para reemprender la construcción de la forma más fiel al espíritu de Gaudí.
Al frente de están los arquitectos Francesc Quintana, Puig Boada y Lluis Bonet Garí, mientras que de la obra escultórica se encarga J. Busquets. En la fachada de la Pasión, el conjunto principal de las figuras escultóricas son obra de Josep María Subirachs. Gaudí solo diseñó el primero de los frentes, que hace referencia al nacimiento de Jesucristo.
En toda la obra se advierte el deseo del artista por emular a la naturaleza, el centro del templo esta planteado con columnas que escenifican un gran bosque, las escaleras emulan las infinitas vueltas de los caracoles, entre tantas alegorías plenas de belleza. Hoy las obras avanzan con rapidez. Ya no dependen de las donaciones, sino que se ven incrementadas notablemente por las visitas que numerosos fieles y turistas de todo el mundo realizan para admirar esta obra única en el mundo.